La amenaza del Cambio Climático es real y ha llegado el momento de que las empresas den un paso al frente y actúen. Ahora, por pequeña que sea, cualquier empresa tiene el poder de influir positivamente en el medio ambiente y reducir su huella de carbono.
Pero, ¿por dónde empezar? No te preocupes, en Gaiambiente hemos preparado una guía aplicable para pymes y grandes organizaciones con los pasos para auditar y conocer cómo caminar hacia la neutralidad climática.
Empezando por la evaluación de la huella de carbono actual hasta la aplicación de estrategias eficaces para reducir las emisiones.
Siguiendo estos consejos ya te estarás poniendo en marcha.
¿Qué es la neutralidad climática o de emisiones aplicada a las empresas?
La neutralidad climática significa alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero. Así de simple y así de complicado.
Esto puede lograrse de dos maneras: reduciendo las emisiones o compensándolas. Reducir las emisiones significa aplicar medidas que reduzcan la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos durante el proceso de producción. Compensar las emisiones significa conseguir cero emisiones netas invirtiendo en proyectos que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero en otros lugares.
Breve introducción a las emisiones de gases de efecto invernadero
Antes de nada conviene repasar un poco de teoría, pero que nadie se asuste.
Las emisiones de gases de efecto invernadero son la principal causa del Cambio Climático. Se producen durante la producción y el consumo de bienes y servicios. Los gases de efecto invernadero más comunes son el dióxido de carbono, el metano y el óxido nitroso. Estos gases atrapan el calor en la atmósfera terrestre, provocando el calentamiento global y el cambio climático. Y cualquier actividad empresarial, por desgracia, los produce.
Beneficios de la neutralidad climática para cualquier empresa
La neutralidad climática no sólo es buena para el medio ambiente, sino también para las empresas. Las empresas que logran la neutralidad climática se benefician de las siguientes maneras:
Ahorro de costes
Reducir las emisiones significa utilizar menos energía, lo que se traduce en facturas energéticas más bajas. Los edificios energéticamente eficientes, por ejemplo, requieren menos energía para mantenerlos calientes en invierno y frescos en verano. Esto se traduce en facturas de energía más bajas, lo que se traduce en un ahorro de costes para la empresa.
Mejora de la reputación
Las empresas que consiguen la neutralidad climática mejoran su reputación como entidades responsables con el medio ambiente. Los clientes, inversores y empleados son más propensos a asociarse con una empresa de este tipo, lo que se traduce en un aumento de los ingresos y una mejor captación de talentos.
Cumplimiento de la normativa
Muchos países han introducido normativas que obligan a las empresas a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Alcanzar la neutralidad climática garantiza que una empresa cumpla estas normativas, evitando posibles sanciones legales.
Ahora sí: Pasos hacia la neutralidad climática
Alcanzar la neutralidad climática es un proceso que implica varios pasos. Este es un esquema de este camino en el que podemos acompañarte:
1. Realización de un inventario de gases de efecto invernadero.
El primer paso para lograr la neutralidad climática es realizar un inventario de gases de efecto invernadero y conocer en qué punto estamos. Esto implica calcular la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos durante el proceso de producción. El inventario debe incluir todas las emisiones, incluidas las procedentes de la electricidad, el transporte y la producción de materias primas.
2. Reducir las emisiones mediante la eficiencia energética y las energías renovables
Una vez realizado el inventario de gases de efecto invernadero, el siguiente paso es aplicar medidas que reduzcan las emisiones. Medidas de eficiencia energética como el uso de luces LED, aislamiento y sistemas eficientes de calefacción y refrigeración pueden reducir significativamente el consumo de energía. Las energías renovables, como la solar y la eólica, pueden sustituir a los combustibles fósiles en el proceso de producción.
3. Compensación de emisiones mediante acciones o derechos de carbono
Conseguir emisiones netas cero puede no ser posible únicamente a través de la reducción de emisiones. En tales casos, las empresas pueden compensar sus emisiones invirtiendo en proyectos que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero en otros lugares. Esto puede lograrse mediante la compra de créditos, bonos o derechos de carbono o a través de acciones como la reforestación.
4. Aplicación de una política de sostenibilidad a largo plazo
No solo basta con actuar una vez. Alcanzar la neutralidad climática es un objetivo a largo plazo. Para garantizar que una empresa mantiene su neutralidad climática, es esencial aplicar una política de sostenibilidad a largo plazo. Esta política debe establecer objetivos de reducción de emisiones, eficiencia energética y uso de energías renovables. También debe incluir un seguimiento e informes periódicos para garantizar que se cumplen los objetivos.
Pero hay grandes retos para lograr la neutralidad climática o de emisiones
Alcanzar la neutralidad climática no está exento de desafíos. Los problemas más comunes que nos encontramos son:
Limitaciones financieras
Aplicar medidas que reduzcan las emisiones puede ser costoso, especialmente para las pequeñas y medianas empresas. Esto puede suponer un obstáculo importante para lograr la neutralidad climática. Por suerte, hacerlo de la mano de una consultora, si bien es una inversión, suele abaratar el proceso.
Falta de conocimientos y experiencia
Muchas empresas carecen de los conocimientos y la experiencia necesarios para lograr la neutralidad climática. Esto puede dificultar la aplicación de medidas eficaces y el seguimiento de los progresos.
Resistencia al cambio
Alcanzar la neutralidad climática exige a menudo un cambio significativo en la forma de hacer negocios de una empresa. Esto puede encontrarse con la resistencia de los empleados y la dirección. Plantear talleres y charlas iniciales suele ser un buen punto de partida. Al final, quien entiende esta cuestión de verdad suele empatizar y apoyarla.
En pocas palabras
La neutralidad climática es un concepto que está ganando terreno en el mundo empresarial, y es así porque va camino de ser imprescindible.
Significa alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero, ya sea reduciendo las emisiones o compensándolas. Alcanzar la neutralidad climática es un proceso que implica varios pasos, como realizar un inventario de gases de efecto invernadero, reducir las emisiones mediante la eficiencia energética y las energías renovables, compensar las emisiones mediante acciones o créditos de carbono y aplicar una política de sostenibilidad a largo plazo.
Aunque alcanzar la neutralidad climática no está exento de dificultades, los beneficios asociados a ella son significativos, como el ahorro de costes, la mejora de la reputación y el cumplimiento de la normativa. Es hora de que las empresas den un paso adelante y actúen para conseguir la neutralidad climática.
En Gaiambiente podemos ayudarte a progresar hacia la neutralidad climática en tu empresa u organización. Somos una consultora ambiental con experiencia en empresas de diversos sectores que nos adaptamos a ti en tu camino hacia la sostenibilidad. Ponte en contacto con nosotros para empezar, cumplir con la regulación y contribuir al medio ambiente.