El mundo avanza a pasos agigantados y algunos cambios parecen auténticos saltos con pértiga. Bien es cierto que los sectores no avanzan igual, por ejemplo, el ámbito tecnológico es uno de los que más ha evolucionado en los últimos 20 años. En materia de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), esta progresión ha sido menos exponencial. Sin embargo, es evidente que las empresas deben adaptarse a la preocupación ambiental y social para no quedarse atrás. En este post te contamos las últimas tendencias en RSC que conviene que las pymes tengan en cuenta.
1. Se acelera la transformación digital
Digitalización y desarrollo sostenible van de la mano: automatizar tareas recurrentes, simplificar gestiones y burocracia, etc., ayudarán a que las decisiones se tomen de forma más ágil y los procesos sean más respetuosos con el planeta. Las soluciones tecnológicas ayudarían a incrementar la eficiencia energética, ahorrar costes y además, a mejorar la productividad.
Dentro de la digitalización, encontramos conceptos como la inteligencia artificial (IA) o el blockchain. Sin ir más lejos, como ejemplo el auge de ChatGPT, un sistema de chat con IA capaz de responder lo que le pidas. En este sentido, las pymes tienen un gran reto por delante que marcará una ventaja competitiva en el futuro próximo.
Sin embargo, también se debe tener en cuenta la huella ambiental de internet dentro de la estrategia corporativa en RSC, para que los cambios que se realizan vayan alineados con el objetivo de reducir las emisiones de carbono.
2. La sostenibilidad presente de forma transversal en la empresa
La pandemia de la COVID-19, la guerra de Ucrania o la continua inflación de los precios de la energía y de los bienes de consumo hacen palpable la necesidad de tener redes de suministro seguras y resilientes. Por ello, poner en valor la producción y comercialización desde un enfoque triple balance (económico, ambiental y social) ayudará a mejorar la seguridad de los procesos.
Por otro lado, la búsqueda de proveedores que garantizan el cumplimiento de los derechos laborales y su desempeño ambiental está intrínsecamente ligada a este punto y por ello, muchas empresas solicitan certificaciones a sus proveedores como la ISO 14001 o la 50001. Más información en Qué certificados ISO son importantes para el medioambiente y cómo conseguirlos.
3. Más transparencia empresarial para atraer inversores y talento
Hace poco te hablamos de la relevancia que tienen los informes de sostenibilidad o informes ESG en la transparencia de las acciones no financieras de una empresa. El hacer público las aportaciones que realiza una empresa para reforzar su compromiso social y ambiental atrae a inversores, administraciones públicas, trabajadores y confianza en los consumidores, clientes y proveedores. De hecho, según el Informe Entornos de Trabajo 2021 realizado por EPSON concluyó que el 83 % de los trabajadores españoles cree que sus empresas de trabajo deben centrarse más en los problemas sociales y ambientales.
La atracción y retención de talento (personas válidas, formadas, leales y que encajan con la filosofía empresarial) se ha convertido en un talón de Aquiles para muchas empresas. «La Gran Dimisión» ocurrida en los meses de pandemia de 2020 en Estados Unidos y la cual, se ha extendido a otros países del mundo, refleja las necesidades y las prioridades de la sociedad actual. La gestión de las personas debe poner foco en la salud mental de los trabajadores. Flexibilizar en la medida de lo posible el horario, el trabajo híbrido, los voluntariados corporativos o que los propósitos personales de los empleados estén alineados con los objetivos empresariales son algunos ejemplos.
4. Acción climática
Al hilo de lo anterior, desarrollar acciones encaminadas a reducir las emisiones de carbono de forma transversal, invertir en innovación para la sostenibilidad y fomentar la economía verde, son temas que cada vez se están normalizando más entre las empresas. No solo para responder a la crisis climática, también para hacer frente a los retos ambientales y legislativos que se presentan.
GAIA Ambiente es una consultoría ambiental formada por especialistas en legislación y gestión ambiental de empresas y organizaciones. Si necesitas ayuda para impulsar tu compañía hacia la sostenibilidad, no dudes en contactar con nosotros.